viernes, 24 de julio de 2015

Fases, ciclos y cuarentonas.

      


Esta noche de insomnio (por suerte son pocas) , he encendido el portátil por primera vez en días . Lo primero que vuelvo a encontrar por ahí es el sentencioso escrito que circula por las redes desde hace unos años , falsamente atribuído a Meryl Streep . Quienes como yo misma os lo sepáis de memoria ya , pues saltáos este copiar y pegar de abajo , y los que no ahí lo tenéis :

      “Ya no tengo paciencia para algunas cosas, no porque me haya vuelto arrogante, sino simplemente porqué llegué a un punto de mi vida en que no me apetece perder más tiempo con aquello que me desagrada o hiere.
      No tengo paciencia para el cinismo, envidias, críticas en exceso y exigencias de cualquier naturaleza. Perdí la voluntad de agradar a quién no agrado, de amar a quién no me ama y de sonreír para quién no quiere sonreírme.
      Ya no dedico un minuto de mi tiempo a quién miente o quiere manipular a mí misma u a otras personas. Decidí no convivir más con la pretensión, hipocresía, lo superficial, la deshonestidad y elogios baratos.
      No consigo tolerar la erudición selectiva y la altivez académica. No me ajusto más con la barriada o el chusmerío. No soporto conflictos y comparaciones.
      Creo en un mundo de opuestos y por eso evito personas de carácter rígido e inflexible.   En la amistad me desagrada la falta de lealtad y la traición.
      No me llevo nada bien con quién no sabe elogiar o incentivar a las personas.
      Las exageraciones me aburren y tengo dificultad en aceptar a quien no gusta de los animales.
      Y encima de todo ya no tengo paciencia ninguna para quién no merece mi paciencia“.

      Así nos sentimos muchas y muchos cuando ya hemos dejado atrás los cuarenta , lo que pasa es que no sabemos escribirlo tan bien . La vida es distinta de cuando teníamos veinte , y treinta , y hasta treinta y cinco . Salvo contadísimas ocasiones , hemos aprendido a ignorar a las personas tóxicas , como está de moda llamarlo ahora , antes eran gente petarda e imbéciles , y nos preguntamos con frecuencia si no seremos nosotros mismos una de ellas , cosa que no nos hubiese pasado por la cabeza plantearnos hace unos años . 
      Si somos mujeres y hombres medianamente sensatos como es de esperar a esta edad , o , para que me entendáis , hemos comprendido que ser "bohemio", "rebelde sin causa" , "libre y despreocupado por el mañana" es símbolo de ser guay a los veinte años, pero suena patético y ridículo a los cuarentaytantos , tendremos ya una familia volando del nido , unos padres que envejecen , unos hermanos que se alejan con sus familias propias , que como la nuestra , crece cada día como debe ser , alejándose del núcleo original . 
      Mucha gente me pregunta por mi próximo libro , por la traducción del primero, por lo que hago escondiéndome del "mundo" , por qué he dejado de publicar en Facebook y encima he borrado mis "¿mejores?" posts . Algunos me dicen que olvido felicitar los cumpleaños en las redes , compartir cosas super importantes , poner "me gusta" a todo el mundo para que me los devuelvan ... Y seguir publicando mi día a día en las redes para que los otros lo cotilleen . 
      ¡Ojo! No lo critico . Cuando estoy en otro ciclo , paso horas haciéndolo , y es normal que los conocidos se mosqueen si desaparezco sin más . Los amigos y familiares en cambio , saben que en verano es cuando más trabajo , en mi profesión , no en mi afición , dos mundos que son polos opuestos , moviéndome entre círculos de personas totalmente antagónicas , donde no puedo hablar de ciertas cosas sin que me miren como si me hubiera salido un tercer ojo en la frente , o un segundo en el culo . Me cuesta horrores salir de un mundo para entrar en el otro, aunque es parte indispensable de mi vida , y si se molestan los conocidos que pese a imaginárselo pretenden que satisfaga todas las obligaciones del día , tienen un problema . 
      Casi no puedo satisfacer las peticiones diarias de mis hijos semi adultos para que pase más tiempo escuchándoles en vez de ir corriendo todo el rato de un lado a otro (que realmente, eso es lo más importante ), los de mi pareja para que deje de torrarle la oreja con mis nimiedades y aprenda a amar el trekking , la natación y el ciclismo de carretera , los de mi madre para que escuche todas las partes del cuerpo que le han dolido mientras yo no estaba a su lado y así hacerme sentir fatal , y los de Facebook , Whatsap , y seriespaquito para obligarme a mantenerme despierta más allá de las 22'30h . Porque mi reloj interno cuarentón me despierta sin falta antes de las 7 de la mañana , y la lavadora , la plancha , la escoba y los pelos de gato que ruedan en bolas grises por el pasillo esperan pacientemente a que les llegue el turno antes de que pongan las calles . 
      Así que , a tres días de cumplir 44 años, puedo asegurar que , como en el escrito de quién sea , yo también he perdido la paciencia para soportar lo insoportable . A los amargados que pretenden amargar a quienes se les siente al lado, a los mentirosos y los falsos , (que a mi edad se les cala a la segunda frase) , a las personas de alma negra que por celos , dinero , presunción , o lo que sea , son capaces de destruir una familia con tal de salirse con la suya , ya sea mediante el arte de las críticas , el vacío , la ofensa directa ... y soy yo quién les ignoro de una ficticia patada en el culo. A mi edad , una ya no se molesta en ser hipócrita más que con quién merece la pena , como debe ser . A los demás , el esfuerzo de enfadarme no merece la pena , es su problema , no el mío, y los malos actos siempre acaban pagándose caros . 
      No me merecen respeto las personas que no les gustan los animales , ni las que no leen ni ven películas , y como tengo una edad , lo digo y me quedo tan tranquila . Porque yo tampoco caigo bien a todo el mundo , y ni me importa ni lo necesito . Nadie lo necesita . Quienes a diario presumen en las redes de tener un millón de los mejores amigos del mundo , y las familias más felices , y las vidas más llenas de diversión sin que parezca que trabajen nunca , me dan mala espina porque solo están mintiendo , así que ni me molesto en mirar sus reality shows de Instagram y demás . Al menos los catetos de telecinco cobran por hacer payasadas .
      
      El otoño volverá , y yo volveré a cambiar de ciclo. Pero la experiencia me acompaña en todos ellos . Y lo que una vez, con 20, 30 años , fueron nervios , estrés , enfados , tristezas ... se han ido convirtiendo en silencios y borrones de personas inútiles en mi vida , a las que he conseguido eliminar para siempre .  Mis hijos se emanciparán, en poco tiempo querrán hacerme abuela contra mi voluntad (y con la boca pequeña) , y se impone cambiar de costumbres y malos hábitos adquiridos . Porque las personas importantes son las únicas que se lo merecen , y por quien debo y quiero hacerlo aunque pierda otras en el camino . Si deseo perderlas aunque algo me pinche el alma al reconocerlo , es que no pertenecen a ese nuevo ciclo . Y a nuestra edad , esas cosas se saben . 
      Así que , volveré . A escribir , a responder , a compartir posts y poner "me gusta" en los vuestros . Este verano de calor infernal , disculpadme , pero la vida real me llena todas las horas del día , a mi pesar .